Flash Cooling

El refrigerante de los vehículos es un elemento esencial para el buen funcionamiento de un motor. Los niveles de refrigerante bajos o escasos pueden causar que el motor se sobrecaliente. Por lo tanto, es esencial comprobar el nivel con regularidad.

Comprobando el nivel de refrigerante

Es aconsejable comprobar el nivel de refrigerante si el motor está frío o a temperatura media. Si el motor está caliente cuando se comprueba el nivel, existe el riesgo de quemaduras debido al líquido caliente que se escapa del tanque de expansión presurizado.

También es importante estacionar el vehículo en una superficie plana y horizontal.

Si el nivel de refrigerante está demasiado cerca de la línea mínima, es importante que se recargue, teniendo cuidado de no exceder este límite. Se puede usar un embudo para un relleno más cómodo y preciso. Es preferible utilizar un refrigerante que cumpla con las recomendaciones del fabricante y es imperativo no rellenar nunca con agua. Esto se debe a que el agua se congela a partir de 0°C, a diferencia del anticongelante del refrigerante, que tiene un punto de congelación mucho más bajo (en promedio entre -15°C y -30°C, dependiendo de la mezcla utilizada).

El nivel de refrigerante debe ser comprobado generalmente cada 10.000 km. También es aconsejable drenar, purgar y reemplazar completamente el refrigerante cada 2 a 4 años, dependiendo del vehículo.

¿Qué hacer en caso de una fuga de refrigerante?

Es posible que un radiador tenga fugas. En este caso, el nivel de refrigerante cae por debajo del nivel mínimo. El motor se sobrecalienta y puede causar daños graves e irreparables al motor.

En este caso, es imperativo identificar la fuga y repararla rápidamente. La fuga es más fácil de identificar porque se caracteriza por la presencia de un depósito blanquecino en su origen, es decir, cerca del radiador, las mangueras y la bomba de agua. Un mal olor en el habitáculo cuando la calefacción está encendida también puede indicar una fuga.

Si está en una abrazadera o en una manguera, normalmente bastará con sustituir la pieza defectuosa. En caso de duda o si hay una fuga importante, consulte rápidamente a un taller.