El sistema de refrigeración de un vehículo es el resultado de un refrigerante/anticongelante de calidad que ha sido sometido a condiciones extremas. Para un enfriamiento óptimo, es imperativo que el refrigerante no contenga ninguna suciedad o partículas que puedan reducir el rendimiento y causar la corrosión de las piezas del motor. Por lo tanto, es importante revisarlo regularmente, drenarlo y reemplazarlo en el momento adecuado o en determinados intervalos de kilometraje para asegurar un rendimiento óptimo de la refrigeración y la salud del motor.
Si el refrigerante del vehículo es viejo, no se ha cambiado durante varios años, ha cambiado de color o tiene consistencia en el tanque de expansión, es hora de drenar completamente el sistema de refrigeración y reemplazar el refrigerante.
Una intervención obligatoria para la buena salud del motor
Con el tiempo y con cada kilómetro recorrido, las partículas pueden acumularse en los refrigerantes, lo que puede provocar corrosión, fugas y otras reparaciones costosas. La eliminación de estos depósitos y el restablecimiento de la protección contra la corrosión son esenciales para que el sistema de refrigeración de un vehículo funcione correctamente, especialmente para evitar las averías causadas por el sobrecalentamiento, las fugas o el fallo del motor.
¿Cuándo hay que drenar el refrigerante?
El período adecuado depende de varios factores: la edad y el estado del automóvil, el tipo de conducción y el tipo de refrigerante del depósito.
Si hay alguna duda sobre cuándo sustituir el refrigerante, se debe consultar el manual del vehículo o las instrucciones proporcionadas por el fabricante del refrigerante.
El cambio del refrigerante es una operación que debe realizarse en todos los vehículos, en promedio cada 2 a 4 años dependiendo del fabricante.
¿Cuáles son los beneficios de un cambio de refrigerante?
Las principales ventajas de un drenaje de refrigerante son :
- Eliminación de los depósitos peligrosos y de la la piedra caliza. Con el tiempo, se pueden formar lodos y partículas en el radiador y las tuberías. Su presencia puede llevar a problemas mucho más graves en los motores. El drenaje los eliminará y restaurará el rendimiento óptimo.
- Lubricación. Drenar y reemplazar el refrigerante usado por uno nuevo lubricará las partes móviles del sistema de refrigeración, como la bomba de agua. Los componentes clave del sistema de refrigeración tendrán una vida útil más larga.
- Una mejor protección contra la temperatura y la corrosión del motor. Es importante elegir un refrigerante de calidad después de un drenaje para proteger mejor contra la corrosión y las temperaturas extremas.